lunes, 28 de febrero de 2011

TORRIJAS EL POSTRE DE CUARESMA


La torrija o torreja aparece ya documentada en el siglo XV, citada por Juan del Encina: «miel y muchos huevos para hazer torrejas», al parecer como plato indicado para la recuperación de parturientas. Las primeras recetas se remontan al Libro de Cozina de Domingo Hernández de Maceras (1607) y Arte de cozina, pastelería, vizcochería y conservería de Francisco Martínez Motiño (1611). La torrija era a comienzos de siglo XX muy habitual en las tabernas de Madrid y se servía con vasos de vino (chatos).
Su asociación a la Cuaresma se debe tal vez a la necesidad de aprovechamiento de pan, que, durante el tiempo en que no se podía comer carne, era por ello menos consumido, aunque las familias elaboraban la misma cantidad. En España, hasta la prohibición de las fiestas de Carnaval por el régimen de Franco, eran típicas de las fiestas de carnaval.
La torrija es un dulce típico de las celebraciones de Carnaval, Cuaresma y Semana Santa en España. Consiste en una rebanada de pan (habitualmente de varios días) que es empapada en leche o vino y, tras ser rebozada en huevo, es frita en una sartén con aceite; finalmente, se aromatiza, a gusto, con diversos ingredientes: canela o algún licor, y se endulza con miel, almíbar o azúcar. Es un alimento de origen humilde que satura pronto al comensal y le mantiene aliviado de la necesidad de probar algún otro plato de carne (alimento sujeto a abstinencia en la cuaresma).
Hoy día es un postre que no debe faltar en ningún buen restaurante que se precie, un postre demandado por los grandes gourmets cada día más exigentes.

Sabes lo que ahorra un jamón en la cesta de la compra, las cenas y los entrantes que te soluciona.
¿Quieres uno y de bellota por menos de 100 euros?
Compralo ya.

No hay comentarios:

Publicar un comentario